Un estudio recientemente publicado en el International Journal of STEM Education ha explorado las preferencias y creencias de los estudiantes de secundaria sobre diferentes opciones de carrera en el ámbito de la ciencia, la tecnología, la ingeniería y las matemáticas (STEM). Los resultados revelan que los estudiantes valoran más algunas carreras STEM que otras, y que sus motivaciones varían mayormente por el contexto sociocultural y las experiencias previas; y en segundo plano, influyen el género y la raza/etnia.
El estudio1, realizado por investigadores de la Universidad de Georgia, se basa en la teoría de la expectativa-valoración situada, que sostiene que las dos principales variables que influyen en la elección de una carrera son las creencias sobre la propia competencia y el valor que se le otorga a la tarea. El valor puede ser de varios tipos: utilidad, interés, importancia personal o coste percibido.
Para el estudio, se encuestó a 526 estudiantes de secundaria de un distrito escolar público del sureste de Estados Unidos, cerca de una gran ciudad. Los estudiantes estaban matriculados en cursos relacionados con las carreras técnicas y agrícolas. Se les pidió que eligieran su carrera STEM preferida de una lista de 15 opciones, y que indicaran las razones que motivaron su elección.
Los autores encontraron que las carreras más preferidas por los estudiantes fueron las relacionadas con la salud (tanto a nivel de doctorado como no doctorado), la ingeniería, los oficios técnicos especializados (como soldadura o maquinaria) y la informática. Las carreras menos preferidas fueron las relacionadas con la ciencia de datos, la nutrición, el diseño asistido por ordenador, la biotecnología o la farmacia y la manufactura.
Las razones más frecuentes para elegir una carrera como la más preferida fueron que permitiría ayudar a otros, que se ajustaría a los intereses personales, que se pagaría bien, que se haría bien o que se encajaría en el entorno laboral. Las razones más frecuentes para elegir una carrera como la menos preferida fueron que no se encajaría en el entorno laboral, que no se haría bien, que no se estaría interesado en los temas relacionados, que la carrera sonaría aburrida o que requeriría mucho tiempo o dinero.
Los autores también analizaron las diferencias según el género y la raza/etnia de los estudiantes. Observaron que las estudiantes mujeres mostraron más interés por las carreras sanitarias que los varones, mientras que estos mostraron más interés por las carreras técnicas especializadas, la ingeniería y la informática. También encontraron que los estudiantes blancos mostraron más interés por las carreras técnicas especializadas que los afroamericanos, mientras que estos mostraron más interés por las carreras sanitarias a nivel de doctorado y la informática.
Estrategias para fomentar el interés por las carreras STEM
La educación profesional es una oportunidad para que los estudiantes descubran sus talentos, intereses y habilidades en diferentes áreas del conocimiento y el trabajo. Sin embargo, muchas veces los jóvenes no tienen suficiente información o motivación para elegir carreras STEM, que son fundamentales para el desarrollo de la sociedad y el futuro laboral. Por eso, es importante que los profesores, orientadores y administradores implementen estrategias para acercar a los estudiantes al mundo STEM y despertar su curiosidad y pasión por estas disciplinas.
Algunas de las estrategias que se pueden implementar son:
- Aprendizaje práctico y basado en proyectos: Este enfoque permite a los estudiantes desarrollar habilidades prácticas, creatividad y trabajo en equipo. Además, les ayuda a conectar los contenidos teóricos con problemas reales y aplicaciones concretas.
- Programas extracurriculares y actividades complementarias: Es importante ofrecer programas extracurriculares y actividades complementarias que promuevan la educación STEM, como talleres, clubes, ferias, concursos, visitas o campamentos. Estas iniciativas pueden despertar el interés de los estudiantes por las carreras STEM, ampliar sus horizontes y ofrecerles oportunidades de mentoría y orientación.
- Enfoque multidisciplinario e integrado: La educación STEM debe fomentar la conexión entre las diferentes disciplinas científicas y tecnológicas, así como con otras áreas del conocimiento como las humanidades o las artes. Esto puede facilitar la comprensión de los fenómenos complejos, el desarrollo del pensamiento crítico y la innovación.
- Desarrollo profesional docente: Los docentes deben estar capacitados y actualizados en los contenidos y las metodologías de la educación STEM. Para ello, se requiere de formación continua, recursos didácticos, apoyo institucional y redes de colaboración entre profesores y expertos.
- Colaboración público-privada: La educación STEM debe contar con el apoyo y la participación de los diferentes actores sociales, como las administraciones públicas, las empresas, las universidades, las organizaciones no gubernamentales y los medios de comunicación. Estos actores pueden contribuir a mejorar la calidad y la accesibilidad de la educación STEM, a difundir su importancia y a facilitar el acceso al mercado laboral de los estudiantes.
- Fomento del espíritu emprendedor: La educación STEM debe estimular el espíritu emprendedor de los estudiantes, es decir, su capacidad para identificar oportunidades, generar ideas, asumir riesgos y crear valor. Esto puede favorecer el desarrollo personal y profesional de los estudiantes, así como el progreso social y económico.
Notas:
- Rosenzweig, E.Q., Chen, XY. Which STEM careers are most appealing? Examining high school students’ preferences and motivational beliefs for different STEM career choices. IJ STEM Ed 10, 40 (2023). https://doi.org/10.1186/s40594-023-00427-6 ↩︎
