En la búsqueda de un sistema educativo más equitativo y eficiente, los expertos están proponiendo un enfoque novedoso: incentivar a los docentes de alto rendimiento para que trabajen en escuelas que enfrentan una mayor desventaja social. Esta idea ha ganado tracción como una posible solución para cerrar las brechas educativas y proporcionar mejores oportunidades para todos los estudiantes.
La novena edición de «Indicadores comentados sobre el estado del sistema educativo español», presentada por la Fundación Ramón Areces y la Fundación Sociedad y Educación, arroja luz sobre el estado de la educación en España en 2023. Este informe exhaustivo ahonda en datos educativos clave, ofreciendo una perspectiva longitudinal y comparativa entre las comunidades autónomas, lo que lo convierte en un recurso único e invaluable.
Álvaro Ferrer, destacado politólogo y responsable de Innovación Social de Save the Children, sugiere explorar incentivos para alentar a los docentes de alto rendimiento a trabajar en escuelas con una mayor proporción de estudiantes en desventaja. Él enfatiza la importancia de la toma de decisiones basada en datos, afirmando: «Comprender las necesidades es esencial para asignar de manera equitativa más recursos a las escuelas más necesitadas». También propone revisar el papel de la tutoría como herramienta de apoyo a los estudiantes y conectar la escuela con los servicios sociales para comprender mejor el contexto de los alumnos y detectar de manera preventiva la desigualdad.
Por su parte, Ana Hidalgo Cabrillana, economista de la UAM, recuerda que el 66% del presupuesto en educación se destina a la retribución de los docentes. Dado que el profesor es fundamental para el aprendizaje de los estudiantes, la eficiencia del sistema educativo está estrechamente relacionada con la atracción y retención de los mejores docentes, así como con la formación y actualización de la plantilla. Ella también sugiere estudiar una política de incentivos salariales vinculados a la evaluación del desempeño docente, lo que permitiría reconocer el trabajo de los más motivados y hacer que la profesión sea más atractiva.
Hidalgo Cabrillana coincide con otros autores del informe en la importancia de contar con datos que ayuden a evaluar las políticas educativas y perfeccionar la dirección de mejora. Aboga por una mayor autonomía en la gestión de recursos humanos y financieros por parte de las escuelas, así como una mayor rendición de cuentas. Por último, en lo que respecta a la formación de los docentes, señala que los programas de tutoría y retroalimentación entre docentes, donde los mejores apoyan a los recién llegados, impulsan el desempeño y fomentan la creación de ambientes de trabajo más colaborativos.
Manuel Valdés (UNED), autor de la parte descriptiva del informe, aporta datos reveladores sobre la situación de los docentes. Destaca que el número medio de alumnos por docente en enseñanzas no universitarias de régimen general ha alcanzado su cifra más baja en los últimos 20 años, situándose en 10,8 alumnos. Además, el número de docentes en enseñanzas no universitarias de régimen general ha aumentado un 14% en los últimos nueve años, y el profesorado que imparte clases en los niveles de ESO, Bachillerato y Formación Profesional en centros públicos ha aumentado un 29% en los últimos siete años. Por último, destaca que el tamaño medio del aula en Educación Secundaria Obligatoria se situó en el año 2020 en 25,4 alumnos, por encima de la media de la OCDE (22,6) y de la Unión Europea (20,9).
Valdés argumenta que «existe una importante desigualdad por origen social en la elección de modalidad de Bachillerato y los docentes pueden jugar un papel fundamental para reducirla». Los alumnos de extracción social baja no solo abandonan la educación después de la ESO en mayor proporción o se matriculan más a menudo en Grado Medio,sino que, cuando eligen Bachillerato, es más probable que opten por las modalidades de Artes, Humanidades o Ciencias Sociales. También señala la evidencia de brechas de género en las diferentes ramas de estudio, destacando que el porcentaje de mujeres en Ciencias y Tecnología se acerca cada vez más a la paridad, aunque persisten diferencias notables entre Ciencias (más feminizada) y Tecnología (más masculinizada).
Este informe, presentado por expertos destacados, brinda una perspectiva completa sobre el sistema educativo español en 2023 y resalta la importancia de atraer y retener a los mejores docentes como una vía hacia una educación más equitativa y eficiente. El debate está en marcha, y se espera que las recomendaciones aquí planteadas contribuyan a un futuro más prometedor para la educación en España.